Rumbo desconocido... "Blue Pegasus"

Había decidido pasar un tiempo de descanso entre misión y misión, por lo que me dirigí al gremio al que pertenecía. Era bastante raro, ya que iba tan solo a coger alguna misión, no a descansar. No solía socializar mucho, por lo que mis destrezas sociales se veían bastante mermadas en este aspecto. Sin embargo, me tomaría este descanso como un entrenamiento de destreza social, para integrarme en el gremio al que pertenecía y demás, aunque todo había que admitirlo, estaba nervioso.

Me detuve en la puerta, donde respiré hondo y entré, vislumbrando la taberna del Blue Pegasus. Era un lugar bastante aburrido, aunque la gente charlase o comiese entre ellos. Sin embargo, me noté la garganta seca, por lo que me dirigí a la barra para pedir una bebida, aunque mirando los alrededores para quedarme con ellos, pero reconocí el habitual tablón de misiones. Mi vestimenta era como si fuese de nuevo a una misión, aunque no iba a hacerlo, ya que aunque llevase mis bastones como medida preventiva, eso no quería decir que fuese de nuevo a una mision.

Me senté al lado de una chica que vestía de negro, con una falda y chaqueta negra. Esta pidió un jugo, aunque yo pedí cuando se acercó el barman un poco de agua fria. Sin embargo, mientras traían las bebidas, oí un comentario de aquella chica, acerca de un mujeriego de cuarta categoría. Suspiré, mientras cogía mi bebida y le daba un sorbo.

- ¿Estas bien? ¿Es que te persigue un mujeriego o que? - Le dije tratando de armar conversación, aunque pronto me di cuenta de que había cometido un error bastante gordo para empezar, ya que las conversaciones se empezaban presentándose uno, no yendo directamente al tema. Me sentía nervioso de ver como reaccionaría aquella chica.

Al parecer no era que le persiguiese un pervertido, pero era algo relacionado. Yo me mantuve callado, mientras ella tomaba un poco mas de su jugo y me rectificaba, diciendo que la pregunta sería el por qué ella no estaba bien. Después me dijo que era alguien sin importancia, poniendo una especie de cara de berrinche de niña pequeña. Entonces cambió el semblante a uno mas tranquilo, y me tendió la mano mientras decía que era un placer el conocerme. Yo se la estreché, aunque algo incómodo porque todavía no andaba habituado a este tipo de trato.

Entonces me preguntó acerca de las misiones, ya que iba vestido como si fuese a ir a una pronto. Suspiré, mientras daba un trago a mi bebida, dispuesto a explicarle su error. De todas formas, era normal y no le iba a reprochar nada, pero mejor explicarselo que no quedarse en la inopia.

- No voy a ir hoy a ninguna, ya que hoy lo tengo de descanso. De todas formas, cogeré alguna para hacer mañana. Mi nombre es Caradryan. - Le dije seriamente, para después dar otro sorbo a mi bebida, tratando de seguir la conversación lo mas fluidamente posible. Que sencillo era en las misiones, y ahora en algo posiblemente rutinario me era muy dificil. Ojala pudiese tomarmelo como una misión, lo cual haría las cosas mas sencillas, pero no era el caso, y tendría que apañármelas como pudiese, que era en definitiva bastante mal.